Tras el fin de la temporada de cosecha en el Noroeste del Pacífico a finales del verano, la demanda de arándanos siguió siendo alta, pero la oferta de frutos de calidad se situó en mínimos históricos. Los volúmenes previstos de Sudamérica no llegaron como se esperaba para llenar la brecha. Los informes revelaron que esta escasez se debió a los efectos adversos de El Niño en Perú, que trajo temperaturas más cálidas que afectaron a los volúmenes de producción.
Fuente: Fresh Plaza
El resultado fue un drástico descenso del 64% en las exportaciones de arándanos de Perú a Estados Unidos, en comparación con el año anterior.
Oasis Farms, Inc., productor de arándanos de Washington, que ya había utilizado RipeLockers en el pasado para prolongar la temporada de sus arándanos, se benefició este año al poder vender toda su oferta almacenada en las cámaras a un retailer de gama alta que buscaba existencias para llenar las estanterías. RipeLockers no solo conservó los arándanos en condiciones óptimas, sino que también ayudó a mantener y aumentar los márgenes del productor fuera de la temporada normal de venta, consiguiendo un precio mucho más alto por kilo.
Aunque se trata de una situación desafortunada, la escasez de arándanos de este año creó una gran oportunidad para demostrar el valor de la tecnología poscosecha patentada de RipeLocker, que permite a los productores almacenar y ampliar la temporada de fruta de calidad con el fin de proporcionar existencias a los retailers durante períodos más largos.
«Fue una situación en la que todos salimos ganando. Pudimos prolongar la temporada de envíos de alta calidad, lo que benefició enormemente al cliente, a nosotros y, en última instancia, al consumidor. El mundo hortofrutícola actual es extremadamente dinámico y difícil de predecir con exactitud. La cadena de suministro necesita todas las herramientas posibles para adaptarse a un entorno de mercado que cambia rápidamente. RipeLocker es una de esas herramientas», afirma Brenton Roy, presidente de Oasis Farms, Inc.
Las cámaras RipeLocker ofrecen un sistema patentado para gestionar la presión atmosférica, la humedad y la composición del gas (oxígeno y CO₂) dentro de las cámaras para prolongar la vida de los productos frescos y las flores. En función de las necesidades específicas de cada tipo de producto fresco o flor, adapta los parámetros de funcionamiento, como la presión interna, el oxígeno y los niveles de CO₂, para optimizar la vida útil y la frescura. El sistema responde a los cambios en el entorno de almacenamiento o transporte y realiza ajustes automáticos para evitar daños y reducir el deterioro.
RipeLocker ha diseñado sus cámaras del tamaño de un palé para que puedan instalarse y utilizarse fácilmente en la cadena de frío existente. Fabricada con materiales novedosos y procesos de fabricación escalables, la cámara puede ofrecerse de forma rentable en grandes volúmenes. RipeLocker ha patentado tanto el diseño de la cámara como su método de funcionamiento.