La política de Cero COVID de China amenaza con desacelerar el crecimiento y las exportaciones de la 2.ª economía del mundo

La política de China de Cero COVID está impactando en la actividad comercial en el país. Las importaciones chinas han caído un 0,1% respecto al año anterior en valor, constituyendo la primera caída desde agosto de 2020, con una cifra muy por debajo del pronóstico medio de un aumento del 8,4%. En tanto, las exportaciones crecieron un 14,7%, según mostraron los datos de aduanas, por encima del pronóstico del 12,8% pero más lento que el aumento del 16,3% en los dos primeros meses del año.

Fuente: Mundomaritimo.cl

Y es que el confinamiento de la ciudad de Shanghái ha creado congestión en el puerto más grande del mundo, con crecientes colas de buques allí y en otros puertos que tratan de manejar envíos desviados. La cantidad de portacontenedores que esperaban frente a Shanghái a partir del 11 de abril fue un 15% más alta que el mes anterior, según datos de Bloomberg.

La escasez de trabajadores portuarios en Shanghái está retrasando la entrega de la documentación necesaria para que los buques desembarquen su carga, según los armadores y traders.

Los bloqueos son sufridos por 17,3 millones de camioneros que mantienen llenos los estantes de las tiendas al mismo tiempo que conectan los puertos del país con sus centros de fabricación, transportando alrededor de las tres cuartas partes de la carga total. Los conductores se ven obstaculizados por reiterados testeos obligatorios de COVID y la necesidad de mostrar resultados negativos en múltiples puntos de control.

Además, el cierre de los centros de almacenamiento de contenedores afecta la capacidad de los patios en el puerto de Shanghái, especialmente para las cargas refrigeradas. CMA CGM, Hapag-Lloyd, MSC y ONE han advertido a sus clientes de que los cargamentos refrigerados se están desviando a otros puertos, debido a la falta de conexiones refrigeradas, mientras que Maersk está omitiendo las recaladas en Shanghái en algunos servicios.

Li Kuiwen, vocero de la administración de aduanas, reconoció que «el ambiente de comercio exterior se está volviendo cada vez más severo y complejo». De hecho, La Organización Mundial del Comercio advirtió que la respuesta estricta de Beijing a los brotes de COVID amenaza con desacelerar el crecimiento y las exportaciones de la economía número 2 del mundo.