Inteligencia Artificial: Zuckerberg apuesta por tecnología robótica ReSking capaz de manipular y “sentir” frutas blandas como uvas y arándanos

Esta nueva tecnología ha sido probada en robots que han manipulado frutas blandas, como uvas o arándanos, y en humanos a través de un guante para coger un pastel pero aún se encuentra en desarrollo.

Fuente: Simfruit

El cofundador de Facebook, Mark Zuckerberg, ahora CEO de Meta, ha confesado que un nuevo material táctil y plástico dará forma a la experiencia sensorial que envolverá del anunciado Metaverso. Junto un equipo de científicos e investigadores de la Universidad de Carnegie Mellon, se conformará una “piel” plástica de unos 3 milímetros de grosor. Con el nombre de ReSkin, contendrá partículas magnéticas que entrarán en contacto con la piel generando un flujo de información para dotar de fuerza y tacto a esta realidad virtual.

A través de un mensaje en su perfil personal de Facebook, Zuckerberg ha explicado este novedoso anuncio. “Nuevas e interesantes investigaciones de nuestro equipo de Inteligencia Artificial ayudarán a adentrarnos en este mundo a través del tacto”, recalcó. “Hemos diseñado un sensor táctil de alta resolución junto con la Universidad Carnegie Mellon para crear una delgada piel de robot. Esto nos acerca un paso más al realismo virtual e interacciones físicas del Metaverso”.

Según se explica en un estudio de la Universidad de Cornell, esta nueva tecnología ha sido probada en robots que han manipulado frutas blandas, como uvas o arándanos, y en humanos a través de un guante para coger un pastel. A pesar de encontrarse en una fase bastante avanzada dentro de su desarrollo, este sistema de Inteligencia Artificial se ha de continuar entrenando en humanos y generar datos sobre la interacción del campo magnético con el propio tacto de los humanos.

Abhinav Gupta, un científico investigador de Meta, detalló a NewScientist que este avance ayudará a tener una visión de la física de los objetivos aún más detallada. “El tacto ha sido descuidado en gran medida por los investigadores de inteligencia artificial porque los sensores táctiles han sido demasiado caros o demasiado endebles para obtener datos fiables”, aseguró Gupta. “A pesar de todo esta nueva tecnología resultará muy útil y tendrá aplicaciones inmediatas”.

ReSkin

En concreto, ReSkin funciona gracias al empleo de unas partículas en su interior que generan campos magnéticos. Cuando toca una superficie, la piel se deforma. Una placa de circuito lo monitorea y envía información a una Inteligencia Artificial (IA), que trata de comprender los cambios de fuerza y tacto que se han realizado para transmitir una respuesta.

«Una piel de detección táctil generalizada como ReSkin proporcionará una fuente de datos de contacto ricos que podrían ser útiles para promover la IA en una amplia gama de tareas táctiles, incluida la clasificación de objetos y el agarre robótico», explica sobre el desarrollo Abhinav Gupta, jefe de la investigación.

Para crear la piel sintética, el equipo de investigadores de Meta entrenó a robots utilizando una llave para abrir una puerta y ordenándolos agarrar objetos delicados, como uvas o arándanos. En el caso de las frutas, los investigadores revistieron una pinza robótica con ReSkin. En imágenes compartidas en el blog de la división de Inteligencia Artificial se puede ver cómo recogen arándanos de una superficie con la presión adecuada. Sin causar ningún daño en la fruta. «El sensor de fuerza incorporado de la pinza es incapaz de completar la tarea, pero con ReSkin, puede detectar la retroalimentación de fuerza lo suficientemente bien como para controlar el agarre», dice Gupta.

Además de otras pruebas, en las que se ha empleado ReSkin para monitorizar los movimientos de un perro y la fuerza emplada por humanos en la realización de tareas manuales, el equipo de Meta ha utilizado la piel para «la localización de contactos en áreas de superficie más grandes», como podría ser el cuerpo de un ser humano.

Con todo, habrá que ver si, finalmente, ReSkin puede ayudar a mejorar el metaverso. Según explica el jefe de investigación detrás de la piel sintética, en declaraciones recogidas por ‘ New Sciencist’, los futuros usuarios de ese mundo virtual querrán «generar experiencias cada vez más ricas, y la clave para eso es la háptica». Es decir, la capacidad de sentir. En este caso, los objetos virtuales y las personas que, sobre el papel, poblarán ese mundo virutal.