Egipto ha pasado de estar en el radar figurativo de la industria del arándano a estar firmemente en los planes de numerosas empresas de Europa y las Américas, sumándose a las dos empresas españolas y neerlandesas que están llevando a cabo proyectos con genética propia.
Fuente: Blueberries Consulting
Para ejemplificar el progreso realizado, otra empresa global con su sede en las Américas está ejecutando un ensayo de 50 ha este año cerca de Alejandría, en estrecha proximidad al río Nilo, y si eso tiene éxito, la visión sería plantar granjas de arándanos más extensas en los próximos años. Otro grupo internacional que utiliza genética desarrollada en Australia que también comenzó con nuevos ensayos en Egipto en el año 2023.
Para poner estos avances en perspectiva, el informe IBO indicó solo 80 ha de superficie dedicada a arándanos en Egipto en 2022, e incluso esta cifra es disputada por algunos como una exageración de la verdadera extensión de las plantaciones.
Recientemente, la mayoría de los proyectos no superaban las 8 hectáreas, predominantemente entre las provincias de El Cairo y Alejandría. Se cree que la temporada del país, una vez completamente desarrollada, imitaría en gran medida la de Marruecos en cuanto a sincronización; el objetivo para uno de los inversores en Egipto (que tiene una latitud similar a la de Agadir en Marruecos) es lograr la producción máxima en febrero.