A medida que la oferta de arándanos se desplaza hacia el norte de Norteamérica, la disponibilidad es actualmente más escasa de lo previsto.

Fuente: Fresh Plaza

Luciano Fiszman, de Gourmet Trading Co., en Redondo Beach (California), afirma que hace dos semanas terminó su temporada en California y se trasladó a Oregón a partir del 18 de junio. Luego, a finales de junio, llegó la ola de calor que afectó a grandes fincas de la costa oeste, y Fiszman dice que algunos productores informaron de que no habían tenido ningún problema en sus cultivos, mientras que otros vieron sus cultivos de arándanos quemados por el sol. Oregón suele mantener la producción hasta finales de julio.

La producción de Washington también comienza a finales de esta semana. «Los informes que estoy recibiendo hasta ahora es que no hay ningún daño en la fruta, pero eso no significa que no haya problemas», continúa Fiszman. La Columbia Británica, en Canadá, también está empezando con la producción y, habiendo experimentado también esa misma ola de calor, los productores de la parte oriental de la provincia parecen estar más afectados que los de la parte occidental. «Cuanto más cerca del agua, menos daños», explica.

Dicho esto, los ojos están puestos en todos los cultivos del noroeste del Pacífico para observar los efectos del calor.

^{Oregón comenzó su producción este año el 18 de junio.}

Producción de la costa este
En el otro lado del país, Fiszman afirma que la producción del sureste sigue siendo baja, aunque esa fruta abastece principalmente a los clientes del sureste. Nueva Jersey está abasteciendo al noreste; sin embargo, los informes dicen que hay menos fruta de la prevista inicialmente, y Michigan también está empezando con la producción.

Por otro lado, la demanda es actualmente más fuerte de lo habitual, incluso después del fin de semana del 4 de julio. «Pensábamos que íbamos a tener más fruta que pedidos, pero la oferta es un poco inferior de lo que pensábamos y la demanda sigue siendo tan fuerte como la semana pasada», señala Fiszman.

Está por ver si esa demanda se mantiene fuerte. «Desde hace uno o dos años, hay más interés por los envases más grandes. Para mí, los envases grandes son una muestra del consumo en casa. Será interesante ver lo que ocurre en las próximas semanas», agrega el experto. «Y si la oferta sigue siendo escasa, habrá una gran demanda de fruta hasta el final del verano».

^{Se espera que Oregón siga produciendo hasta finales de julio.}

Impulso
Todo esto hace que los precios se mantengan estables. «Eso es lo mejor que le puede pasar al mercado. Cuando los precios satisfacen a la mayoría de las partes del sector, se crea un impulso y así se mantiene la demanda», afirma.

De cara al futuro de las importaciones, mientras que en septiembre es cuando los retailers comienzan a trabajar en el cambio a la fruta importada de Perú, el propio país sigue cambiando dónde envía sus primeros volúmenes. «Perú volverá a tener volumen más pronto. Pero también está enfocando sus primeros dos meses en Asia porque Estados Unidos todavía tiene producción nacional en ese momento», concluye Fiszman.