Pese al anuncio de algunos medios de comunicación, hace algunos meses, sobre cierto “relajo” de las medidas para abordar el combate del Covid-19 en China, lo cierto es que la política del “Covid-0” sigue aplicándose, y de manera estricta.

Fuente: Simfruit

Según reportaron ayer los medios South China Morning Post y Crisis 24, las autoridades decidieron continuar con las medidas de restricción o cuarentena COVID-19 en Shenzhen, especialmente en los distritos de Futian y Luohu que han sido clasificados como de riesgo medio o alto.

Los residentes de esos distritos deben permanecer en sus casas; puede haber excepciones en caso de emergencia y por razones esenciales. Mientras que también han sido restringidos los viajes hacia y desde las comunidades afectadas, y los negocios y locales de ocio permanecen cerrados.

Este 21 de septiembre las autoridades decidieron mantener las medidas, pese a que en tres días no se han presentado nuevos casos confirmados en la comunidad. Además, se siguen realizando pruebas Covid antes de determinar “suavizar” las restricciones.

Los medios indican que es probable que se sigan incrementando los controles sanitarios en los puestos de control fronterizos, puertos y otros centros de transporte de pasajeros de Shenzhen. El gobierno exige a los viajeros entrantes que tengan un resultado negativo de la prueba COVID-19 obtenido en un plazo de 48 horas.

En tanto, a los residentes y visitantes que regresan de zonas de alto y medio riesgo de China se les exige “autocuidarse” (aislarse) durante siete días. Los visitantes procedentes de zonas de alto riesgo deben someterse a pruebas o test Covid los días 1, 2, 3, 5 y 7 después de su llegada, mientras que los viajeros procedentes de lugares de riesgo medio sólo deben someterse a las pruebas los días 1, 4 y 7.

Asimismo, los viajeros procedentes de ciudades con zonas de riesgo deben someterse a las pruebas las 24, 48 y 72 horas siguientes a su llegada y abstenerse de utilizar el transporte público, así como asistir a reuniones o cenar en restaurantes durante el periodo de tres días.

La misma situación de Shenzhen se vive en la Provincia de Guizhou, donde el gobierno ha designado amplias zonas de las ciudades de Guiyang y Bijie y partes de la ciudad de Zunyi como de alto o medio riesgo. Sus residentes sólo pueden salir de casa para someterse a las pruebas de COVID-19; cualquiera que dé positivo en las pruebas de COVID-19 puede enfrentarse a la cuarentena en las instalaciones gubernamentales. Los medios de comunicación han alertado que la severidad de las medidas en la zona probablemente producirá interrupciones en las operaciones comerciales y en la cadena de suministro de las zonas afectadas.

Cabe destacar que la cuarentena estaría afectando a millones de personas, pues Shenzhen tiene cerca de 17 millones de habitantes y la Provincia de Guizhou 38,5 millones. Además, el puerto de Shenzhen es el segundo en importancia dentro de China, después del puerto de Shanghai.

Finalmente, se destaca el fin del confinamiento en gran parte de la megaciudad de Chengdú, capital de la provincia de Sichuan. Sin embargo, los residentes deberán seguir sometiéndose a test Covid al menos cada siete días. Asimismo, las personas deben tener resultado negativo, dentro del plazo de 72 horas, para entrar en zonas públicas (excluidos los patios comunitarios) o utilizar el transporte público. Asimismo, deben tener resultado negativo no superior a 48 horas para entrar en negocios no esenciales, de ocio y salir de la ciudad.