Los cargadores de productos perecederos se están quedando en la cuerda floja porque las navieras optan por transportar la carga general en frigoríficos sin conexión, lo que aumenta la escasez de equipos.

Fuente: Simfruit

Según Drewry, los fletes de los frigoríficos volvieron a aumentar en el tercer trimestre, y el analista espera una aceleración similar a lo largo del próximo año.

Drewry, indica que la media ponderada de los fletes de las 15 principales rutas comerciales de alta mar con uso intensivo de frigoríficos aumentó un 48% entre enero y septiembre, y se espera que a finales del cuarto trimestre este aumento llegue al 55%.

Y añadía: “El auge de los fletes de los buques frigoríficos sigue la estela del sector de la carga seca, ya que los operadores reajustan las expectativas de riesgo/ingresos para la carga refrigerada, en consonancia con los costos más inflados del sistema y los retos operativos, como los tiempos de permanencia prolongados en los puertos de transbordo y los tiempos de ciclo más largos de los equipos de contenedores”.

Como resultado, señaló Drewry, los expedidores de cargas de menor valor, como plátanos, cebollas, cítricos o verduras congeladas, se enfrentan ahora a unos costos de transporte mucho más elevados después de haber disfrutado de años de tarifas de flete relativamente bajas, que les ayudaron a desarrollar mercados lejanos.

Según el analista, se espera que el tráfico marítimo de contenedores refrigerados aumente un 3,2% este año, hasta los 136 millones de toneladas, y que todas las mercancías crezcan, excepto los plátanos.

“El comercio de carne a Asia se está ralentizando, debido a la bajada de los precios del cerdo en China, y se espera que el comercio de plátanos disminuya un 5% este año, debido a las enfermedades en la cosecha de Filipinas y a los bajos precios del plátano en general”, explicó Drewry.

Aunque la producción de nuevos contenedores frigoríficos ha alcanzado un récord de 170.000 feu este año, esto “no se ha traducido necesariamente en una mayor disponibilidad de equipos”, puntualizó Drewry, ya que, los transportistas habían utilizado los frigoríficos para transportar carga seca.

Pero Rafael Llerena, director general de 3PL EasyFresh, señaló que la principal razón de la escasez de equipos era la congestión portuaria. Precisó a The Loadstar que, “evidentemente, los riesgos aumentan si un contenedor frigorífico que contiene productos perecederos pasa tres semanas en un barco anclado fuera de un puerto sin disponibilidad de atraque. Además, en algunos puertos, las zonas de atraque de contenedores se están utilizando en parte para almacenar contenedores de carga seca.

Desde que comenzó la pandemia, las navieras decidieron que la carga seca tendría prioridad sobre la refrigerada. Esto no es nuevo, pero seguramente se ha convertido en un fenómeno acentuado, dadas las circunstancias excepcionales”, comentó.

Llerena dijo que los cargadores de perecederos estaban, en general, “luchando por el espacio” y tratando de hacer frente a la crisis mundial de congestión portuaria, con el envío de feedering convirtiéndose en una responsabilidad cada vez mayor.

“El feedering está siendo sustituido por el multimodal, siempre que sea factible, dada la congestión de los muelles: intentamos vaciar la unidad en un almacén frigorífico y luego en camión o por ferrocarril, frente a la espera del buque feeder”, destacó.

Dados los elevados costos del transporte desde orígenes lejanos, Llerena informó que la tendencia de “abastecimiento local” también estaba ganando cierta tracción.

“Los productos de bajo valor, como los frescos, son más sensibles si los minoristas de alimentación no reflejan el aumento de los precios al consumidor final”, añadió.