Cadena logística podría iniciar tendencia a normalización recién a fines de este 2022

El aumento en las tarifas de transporte, escasez de contenedores, demoras en las entregas de bienes o interrupción de la cadena de suministros han elevado los costos de los productos.

Fuente: El Mercurio

Estos últimos 12 meses han estado marcados por una desenfrenada inflación y un galopante consumo en la economía nacional. En el último boletín del INE, el IPC anotó un alza anual de 7,7%, alcanzando un nivel no visto en muchos años. Detrás de esto hay distintas razones, como la mayor liquidez, el alza en el tipo de cambio, el incremento de los combustibles. Estos factores, además, influyen en problemas logísticos a nivel internacional, de los que Chile no se ha salvado.

De hecho, en el último Informe de Política Monetaria (IPoM) de diciembre, se advirtió este tipo de problemas. ‘Los cuellos de botella continúan presionando las cadenas logísticas y productivas globales en diversas industrias, en un contexto en que los costos de transporte siguen altos. Esto se ha reflejado en la escasez de inventarios y en la persistencia de los retrasos en las órdenes de compra. (…) Información de la OCDE señala que esta situación podría extenderse por un tiempo más prolongado’, advierte el informe.

De acuerdo a estimaciones del grupo naviero Maersk, que maneja uno de cada cinco contenedores enviados en todo el mundo, la situación actual del mercado persistiría en el segundo trimestre antes de aliviarse más adelante en el año.

El gerente de estudios de Gemines Consultores, Alejandro Fernández, plantea que el tema de los aumentos de costos, por problemas logísticos y otros que provienen del exterior explican una parte de las alzas de precios que hemos visto en Chile, pero no constituyen inflación propiamente tal (alza sostenida en muchos precios simultáneamente), sino que son alzas que se producen por un shock negativo de oferta. ‘La inflación existe cuando el crecimiento de la demanda es excesivo’, explica.

No obstante, la gerenta general de la Asociación Logística de Chile, Cynthia Perisic, cuenta que en la actualidad el sector tiene problemas de costos y de tiempos, que han hecho que los productos finales estén al alza. ‘Los costos básicamente están en la liberación de las mercancías y en las secuencias. Esto es en los concesionarios de los puertos, porque ahí se está con una demora muy importante. Cuando llega una mercancía al país se tiene cierta cantidad de días libres de operación mientras se bajan del buque, y la clasifican o la dejan disponible para que se pueda retirar. Esa cantidad de días libres, por lo general, es entre cuatro y siete. Hoy, posterior a esa cantidad de días libres que se tienen de operación, que es intraportuaria, se empieza a pagar. Esos pagos hoy día son gigantescos, porque esos 7 días libres se usan y con la operación que hay ya se está llegando incluso a 14-15 días, para recién obtener tu contenedor con tu mercancía’, explica.

Agrega que ahí hay un cargo que no es menor, y es sumamente importante y que puede llegar incluso a triplicar el valor de la mercancía, en muchos casos. ‘Esto, dependiendo del artículo que sea y del valor que este tenga’, detalla.

Perisic cuenta que esto difícilmente se va a solucionar este año. ‘Por lo menos, es lo que dicen los expertos. No es algo que se vaya a solucionar de aquí al primer semestre ni al segundo. Porque tiene que empezar a correr toda una operación en forma normal, y se tienen que recuperar todos los contenedores vacíos para que las navieras empiecen a tomar sus rutas en forma más normal y sus frecuencias. Y, además, tenemos que solucionar un tema importante a nivel país, que es el de la seguridad para que los transportistas se vuelvan a sumar al trabajo del tercer turno y a operar de forma más regular’, detalla.

Y proyecta: ‘¿Cuándo se va a resolver? Es muy difícil, no me atrevería a dar una fecha. Esperamos que, idealmente, para el último trimestre de este año esto tienda a normalizarse’.

Operación bajo estrés

José Fernando Aguirre, gerente general de la Cámara Marítima y Portuaria de Chile (Camport), detalla que a nivel mundial, y también en Chile, las cadenas logísticas están operando bajo condiciones de estrés. ‘Desde el segundo semestre del año 2020, cuando China reabrió sus fábricas y se produjo una sobredemanda global para reponer los stocks, los problemas se han sucedido uno tras otro. Esto ha motivado a que algunos analistas hablen de ‘la tormenta perfecta», plantea el ejecutivo de la asociación.

Precisa que hoy, principalmente a raíz del covid-19, existen problemas de personal para conformar los distintos turnos de operación; además, hay falta de choferes de transporte terrestre, que son indispensables para sacar e ingresar la carga a los puertos. ‘Esto implica, por ejemplo, que el retiro de los contenedores de los patios de acopio dentro de los puertos está tomando mucho más tiempo de lo habitual. Entonces, los patios de almacenamiento congestionados impiden que la nave siguiente pueda trabajar con normalidad’, plantea.

Señala, además, que todas estas situaciones afectan la cadena logística en nuestro país, donde además existen circunstancias especiales que aumentan el grado de dificultad. ‘Dentro de estas circunstancias particulares de Chile están los cierres de puerto, que han aumentado en forma importante en los últimos años. También, las cuarentenas obligatorias a las naves de comercio exterior cuando se detectan tripulantes contagiados, las que son determinadas por ciertas autoridades sanitarias regionales, y que impiden la transferencia de carga, en circunstancia de que en otras regiones eso no es problema, porque se toman las medidas de resguardo adecuadas’, señala.

Y advierte: ‘Desde hace meses los analistas dejaron de hacer predicciones respecto del momento en el cual terminará esta crisis. Por ahora, hay varias rutas navieras en las cuales los precios se han estabilizado e incluso están comenzando a bajar, lo que es una buena señal; sin embargo, todos coinciden en que el término de esta crisis dependerá de cómo evoluciona la actual masa de contagiados y de la aparición de nuevas variantes del virus’.