Azerbaiyán: «El concepto de llegar tarde al mercado irá disminuyendo en los próximos años»

Si de Ilyas Ahmadov depende, el concepto de llegar tarde o temprano al mercado disminuirá para su cultivo de arándanos. El gerente general de la empresa azerbaiyana BerryBlues observa que las temporadas de algunos países se solapan, «en consecuencia, en el futuro habrá que poner el foco en nuevos cultivares, con mejores cualidades de conservación y una vida útil mayor», en sus palabras.

Fuente: Fresh Plaza

Hace dos años, el grupo WeGrow decidió ampliar su cultivo de tomate y apostó por un cultivo no tradicional nunca antes cultivado en Azerbaiyán: los arándanos. Su proyecto BerryBlues es ahora una empresa de 20 hectáreas con una densidad de 8.333 plantas por hectárea.

¿Cómo ha ido? ¿Cómo ha sido emprender en un año marcado por la COVID? Por suerte, gracias a la red de Ilyas, no ha sido difícil formar a suficientes personas. «La realización del curso sobre arándanos en una de las principales universidades de los Estados Unidos nos permitió hacer frente a la ausencia de consultores de arándano y hacer las cosas por nuestra cuenta», explica. «Aún tenemos que practicar más la poda y la recolección, porque algunos de los cultivares todavía son novedosos para nosotros porque se plantaron este año».

Aunque BerryBlues puede exportar a dos países diferentes, ha sido una temporada complicada. Según Ilyas, el mercado se ha dividido en dos fases. «En junio, los precios fueron los previstos. Marruecos y España estaban fuera del mercado por las condiciones meteorológicas y problemas de calidad. Sin embargo, en comparación con junio del año pasado, este mes las condiciones de mercado favorables duraron 5 o 6 días menos». Señala que el motivo fue un aumento de la oferta de Georgia.

En julio, los precios en algunos mercados, en especial en Rusia y Ucrania, fueron hasta un 20-30% más bajos que el año pasado por las mismas fechas. Hay varios motivos, dice Ilyas. «Según algunas fuentes, Georgia está produciendo arándanos en más de 1.000 hectáreas, más de la mitad de las cuales han alcanzado su pleno potencial. Lo mismo ocurre en Ucrania, pero su temporada empieza tres semanas después. Rusia también ha empezado a plantar muchos arándanos, y algunas plantaciones ya han entrado en su segunda temporada de cultivo».

Si se analizan estos desarrollos del mercado, Ilyas prevé que, por los varios cultivares que se producen, las temporadas de algunos países seguirán solapándose con otras. Por ese motivo, en el futuro, BerryBlues pondrá el foco en nuevos cultivares aptos para una conservación más prolongada y con mayor vida útil. «El concepto de llegar tarde al mercado irá disminuyendo en los próximos años», afirma.

Está convencido de que el cultivo en macetas es el futuro de los arándanos. «No cabe duda. Seguiremos aprendiendo cada año y seguiremos probando varias técnicas de densidad de plantación y riego. Los obtentores crean nuevos cultivares cada año, lo que hace que el consumidor tenga que elegir entre numerosas variedades. No nos sorprendería que, dentro de 2 o 3 años, los consumidores nombraran algunos arándanos por su nombre de cultivar».